Un estudio del British Medical Journal descubrió que el tomar té, café o cualquier otra bebida a una temperatura superior a 70ºC, produce más riesgo de padecer cáncer esofágico. Un hábito muy extendido de ingerir alimentos y bebidas muy calientes podría duplicar el riesgo de desarrollar el cáncer de esófago. En países como Argentina y Uruguay donde la costumbre de tomar mate, está muy arraigada, es donde más se da este tipo de cánceres.

Varios estudios demuestran que el tabaco y el alcohol también son dos de los principales enemigos de este tipo de cáncer.
En Japón, se detectó, un alto índice de Cánceres de garganta y de lengua, en los varones. Descubrieron que eso se debía a que beben el té muy caliente, y como por la tradición se le debe servir primero al hombre (porque la mujer lo bebe después cuando ya no quema), se supo cuál era la causa que producía la enfermedad especialmente en ellos.
Tomar fresas podría ralentizar la progresión de lesiones precancerosas en el esófago.
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